sábado, 22 de marzo de 2008

Nº 12. Del 17 al 23 de Març de 2008

nº 10
Horario de celebraciones
Semana Santa 2008

Lunes 17. A las 9 Misa en Montaverner. A las 16 Celebración Penitencial en Benissuera. 17-18 horas Confesiones en Montaverner. 19 Confesiones en Alfarrasí. A las 19.30 Misa en Alfarrasí.
Martes 18. De 11 a 12 Confesiones en Montaverner. De 16 a 17 Confesiones en Alfarrasí. A las 17.30 Confesiones en Montaverner. A las 18 Misa en Montaverner. A las 19.30 Misa en Alfarrasí. A las 20.30 Traslado de la Virgen de los Dolores a la casa de Tarsileta Jornet en la calle Mayor,27
Miércoles 19. San José. A las 8.30 Confesiones en Montaverner. A las 9 Misa en Montaverner. A las 10.30 Misa en honor al Titular en Benissuera. A las 11.30 Misa en Alfarrasí. A las 12.30 Misa en Montaverner. A las 16 Santo Rosario en la casa de la clavario. A las 18.30 Confesiones en Alfarrasí. A las 19 Misa en Alfarrasí en sufragio del Rvdo. D. José Sanandrés. A las 22 Confesiones en Montaverner. Santo Rosario en la casa del Clavario.
Jueves Santo 20. De 12 a 13 Confesiones en Montaverner. De 13 a 13.30 Confesiones en Alfarrasí.
TRIDUO PASCUAL.
JUEVES SANTO.
A las 18 Misa de la Cena del Señor en Benissuera (preside D. Enrique Benavent, obispo auxiliar)
A las 18 Misa de la Cena del Señor en Montaverner.
A las 20 Misa de la Cena del Señor en Alfarrasí.
A las 23 Hora Santa en Montaverner.
A las 23 Hora Santa en Alfarrasí (preside D. Enrique Benavent).

VIERNES SANTO
A las 10 Via Crucis en Montaverner.
A las 11 Via Crucis en Benissuera
A las 12.30 Meditación de las Siete Palabras en Montaverner.
A las 13.15 Meditación de las Siete Palabras en Alfarrasí.
A las 18 Acción Litúrgica de la Pasión de N.S. en Benissuera.
A las 18.30 Acción Litúrgica de la Pasión de N.S. en Montaverner (preside D. Enrique Benavent).
A las 20 Acción Litúrgica de la Pasión de N.S. en Alfarrasí.
A las 21.30 Solemne Procesión del Santo Entierro en Montaverner (preside D. Enrique Benavent).
A las 23 Via Crucis en Alfarrasí.

SÁBADO SANTO.
COMIENZA EL TIEMPO PASCUAL.
A las 20 Vigilia Pascual en Benissuera.
A las 23 Vigilia Pascual en Alfarrasí (preside D. Enrique Benavent).
A las 23 Vigilia Pascual en Montaverner.

DOMINGO DE PASCUA.
A las 9 “L’Angelet de la Corda” y Misa Solemne (preside D. Enrique Benavent)
A las 11.30 Misa de Pascua de Resurrección en Benissuera.
A las 12.30 Misa de Pascua de Resurrección en Montaverner.
A las 20.30 Traslado de S. Blas en Montaverner y baile de la bandera.

LUNES DE PASCUA.
A las 8 Rosario de la Aurora en Montaverner.
A las 9 Misa en Montaverner.
A las 10 Misa en la Ermita de Alfarrasí en sufragio de Enrique Martí, Milagro Vidal y Fernando Martí Vidal; María Sanz Martí.
A las 12 En Montaverner Misa Solemne en honor a S. Blas presidida por D. Enrique Benavent.;
A las 20.30 Solemne procesión en honor a S. Blas, al finalizar Baile de la Bandera.




PINCELADAS.
Queridos amigos:
Mañana de un jueves de pasión. Dentro de siete días me sumergiré con vosotros en el Misterio Pascual, en la Pasión de Dios por la humanidad.
Terminada la misa en Alfarrasí, desayuno y a trabajar cara el ordenador. En mi cabeza la predicación de la tarde en Beniatjar y la Font.
Entro en internet, en el blog del Seminario Menor. Javi Grande, el rector, nos regala un video. Pincho y ¡cuánta belleza y profundidad en él! Imágenes de Jesús de Nazaret iluminan una canción bellísima que habla de amor, el amor de la Madre al Hijo. La curiosidad me lleva a buscar el autor, Martín Valverde y, quien sabe si guiado de la mano de Dios, a tantas canciones de este costarricense, casado y padre de tres hijos, pero sobre todo, un enamorado de Dios, al que canta canciones.
Y él me lleva a una de ellas, cantada tantas veces por el coro junior, emotiva. En youtube encuentro al autor cantándola. Surgió en Febrero de 1990, en Chiguaga, en medio de un concierto, según él “estaba en un concierto y algo que siempre pido, por favor, guardad silencio y hablad con Dios y en eso me agarra el Señor muy amáblemente del cuello y me dice, “diles que los amo”.
Y así surgió esta canción que bien puede constituir el eje sobre el que vivir la Semana Santa y el Triduo Pascual: “Nadie te ama como yo”.
Sencillamente, mientras escucho al autor, siento que esa es la verdad de la Pasión y de cuanto vamos a vivir estos días: Nadie te ama como yo.
Dios nos lo dice todos los días, pero especialmente hoy, a ti y a mí y en estas horas de gracia, de amor gratuito de Abbà, el papaito de Getsemaní, cuando me lo susurra al oído, a mí y a ti, amigo lector, amiga lectora.
Cuando te acerques el jueves a la Misa, entre los cantos de la guitarra y el gesto, sencillo y profundo del sacerdote, ofreciendo el pan y el vino, escucha al buen Dios que te dice: “Cuanto he esperado este momento, cuanto he esperado que estuvieras asi, cuanto he esperado que me hablaras, cuanto he esperado que me vinieras a mí, yo se bien lo que has vivido, y se también porque has llorado, yo se bien lo que has sufrido, pues de tu lado nunca me he ido, pues nadie te ama como yo, pues nadie te ama como yo, mira la cruz, esa es mi más grande prueba, mira la cruz, fue por ti, porque te amo.
Al contemplarle, después de la misa, marchar cautivo hacia el sagrario, escucha a Cristo decirte, desde las manos del sacerdote: nadie te ama como yo.
Acércate a Él estos días y siente que nadie te ama con Dios, en la oración ante el monumento, el te susurrará, nadie te ama como yo.
Y en esa noche, de oración y silencio, en Getsemaní, la casa a Anás y de Caifás, llevado como un muñeco al Pretorio, expuesto a la vergüenza pública, azotado y coronado de espinas, mirando a quienes le insultan y condenan de muerte, escucha su grito: nadie os ama como yo.
Al amanecer acércate a la via dolorosa, el camino del amor y escucha en cada una de sus tambaleantes pisadas, lo que quiere decirte: Nadie te ama como yo.
Y por amor tenderá sus manos y dejará que las claven al madero, esa será su única pertenencia en la hora de su muerte. Contemplale, porque en la cruz sólo tendrá una palabra para ti: nadie te ama como yo, y porque te amo grito, muero confiando en quien Nadie me ama como Él, Abbá, el Padre.
Siente en la soledad del sábado santo la presencia de un Dios que en la profundidad y el vacío resucita para decirte, Nadie te ama como yo.
Queridos amigos:
Comenzamos la Semana Santa, un tiempo para vivirlo en familia, la gran familia de Jesús que formamos la comunidad parroquial. Son días para vivirlos en parroquia, interiorizando la riqueza que en cada celebración litúrgica y devocional hay.
Y como, en la mañana de Pascua revivir l’angelet de la Corda.
Un nuevo año y siguiendo la estela que dejó la niña Otilia Vidal, en 1912, otra pequeña recorrerá la plaza para, ante la emoción de los presentes, descubrir el rostro de María. Y en esta ocasión, posiblemente, por primera vez en su historia, en presencia de un sucesor de los apóstoles, de los testigos del primer encuentro, el obispo auxiliar de Valencia D. Enrique Benavent.
Desde aquí os animo a disfrutar con la oración y el encuentro con Dios, fijando la mirada en Áquel que desde el cenáculo, Getsemaní, el Gólgota y el lugar de la Resurrección, nos mira y te dice:
José

ESPECIAL SEMANA SANTA.
El cenáculo.

Cada vez que coméis de este pan y bebéis del cáliz, proclamáis la muerte del Señor, hasta que vuelva.


El lugar…
Un lugar donde compartir una fiesta, tradiciones, y estrechar lazos con los tuyos.
Un espacio en el que celebrar, pero no de una manera rutinaria, sino poniendo toda tu vida en la celebración.
En esa sala, comiendo con los tuyos tomas un pan que partes y un vino que compartes, y con ello estás expresando lo que es tu vida… y lo que puede ser la nuestra.
En esa sala te ciñes la toalla a la cintura y lavas los pies de los tuyos, porque los que aman lo hacen así, con absoluta entrega.
En esa sala les hablas y les dices:
Sois mis amigos...
Para pensar….
¿Servir o servirme?
¿Me arrodillo o permanezco impasible ante el sufrimiento?
¿Perdono o guardo todas ofensas en el disco duro de mi memoria?
¿Adoro a Dios o a mis propios dioses?

Con los Santos Padres…
“Diariamente nos lava los pies aquel que intercede por nosotros; tenemos neceidad de lavarlos a diario, es decir, enderezar los caminos por los que se mueve nuestro espíritu según lo confesamos en la oración dominical… el que lavó los pies a sus discípulos es fiel y justo de modo que perdonará nuestros pecados y nos lavará de toda iniquidad”
San Agustín.

Getsemaní
Padre mío, si esta copa no puede pasar sin que yo la beba, hágase tu voluntad
Mt 26,42
El lugar…
El lugar de la duda, de la oración desesperada, de la tormenta. El lugar de la noche atravesada por la indecisión. El lugar del miedo y de la soledad…
En ese huerto tu oración habla de una lucha terrible, Jesús. ¿Entregarse o no? Es tu vida un fracaso? ¿Huir o seguir hasta el final? ¿Qué sentido tiene todo esto? En ese huerto te veo tan humano, y al tiempo tan pleno… Tan inseguro, y sin embargo capaz de buscar claridad, y al final de acoger, perplejo y turbado, una situación que te desborda.

Para pensar….
¿Ante las dificultades dedico tiempo a la oración para escuchar a Dios?
¿Mi voluntad o la voluntad del Padre?

Con los Santos Padres…
No les prohíbe el sueño, cuya hora no estaba en un momento inminente, sino el sueño de la infidelidad y el embotamiento de la mente.
San Jerónimo


La via dolorosa
Le pusieron sus ropas y lo llevaron a crucificarlo
Mt 27,31

El lugar…
Un camino como tantos caminos del mundo.
Una via que sale de Jerusalén hasta más allá de las murallas.
Calles por donde la gente camina, conversa y mira.
Y en ella un hombre carga con la cruz, el Hijo de Dios, expulsado de la ciudad, condenado a morir en el madero.
Y tú diriges tu mirada: a tus verdugos, a tu Madre, a la Verónica, al Cireneo, a las mujeres
Dichosos los limpios de corazón, dijiste, porque ellos ven a Dios en los demás y su mirada irradia amor, perdón y compasión.

Para pensar….
En las dificultades, ¿puede más en mí el amor que el odio?
¿Ayudo al que se cae y escucho al deprimido?
No me salva la cruz en sí misma, sino el amor que Cristo ha puesto en ella, ¿lleno de amor mis cruces?

Con los Santos Padres…
Al salir del pretorio Jesús mismo llevaba su cruz; después tuvo lugar el encuentro con Simón, a quien cargaron la cruz para que la llevara. Pero, según la anagogía, los gentiles reciben la cruz de Jesús y un extranjero obediente lleva la ignominia del Salvador.
S. Jerónimo
Gólgota.
¡Elí, Elí! ¿lemá sabactaní?
Mt 27,46
El lugar…
Ese monte de cruz, amor y llanto.
Un lugar cargado de densidad.
En él está el amor fiel y atravesado de una madre, la fidelidad de un discípulo y el coraje de aquellas que no abandonan; la esperanza herida de un ladrón bueno y el rencor ciego, de un mal ladrón; el reconocimiento asombrado de un centurión…
Y sobre todo, una muerte que es consecuencia de una forma de vida; una entrega que se fue haciendo de gestos, palabras, y obras.
Es el lugar de la opción.

Para pensar….
¿Desde dónde te sitúas?
¿Desde dónde vas a mirar la escena?
¿Cómo vives hoy y ahora los Gólgotas de la humanidad?

Con los Santos Padres…
hoy, pues, el enemigo, en lugar de ver las purtas rociadas con sangre simbólica, ve brillar en los labios de los fieles, puertas de los templos de Cristo, la sangre del verdadero Cordero [la eucaristía], huirá todavía más lejos.
San Juan Crisóstomo

El santo sepulcro
Lo descolgó, lo envolvió en una sábana y lo depositó en un sepulcro cavado en una roca
Lc 23,53

El lugar…
El sepulcro no es sólo el lugar evidente donde debían dejar el cuerpo sin vida de Jesús.
El sepulcro es el lugar de la expectación, de la fe a pesar de las evidencias.
Dios ha hecho una promesa ¿cómo podrá cumplirla ahora? Es el espacio del silencio y de la espera.
En el que parece que nada ocurre (pero algo está germinando)
El lugar del cansancio y tan vez de la tentación de rendirse.

Para pensar….
Con María, ¿permanezco fiel a Dios cuando él calla?
Con María, ¿vivo la muerte de mis seres queridos desde la esperanza en la resurrección?
Con María, ¿soy persona orante en los momentos de dificultad, oscuridad, desierto, muerte?

Con los Santos Padres…
[Jesús a Adán]Contempla los salivazos de mi cara, que he soportado para devolverte tu primer aliento de vida; contempla los golpes de mis mejillas, que he soportado para reformar de acuerdo con mi imagen, tu imagen deformada; contempla los azotes en mis espaldas, que he aceptado para aliviarte del peso de los pecados, que habían sido cargados sobre tu espalda.
Homilía antigua sobre el grande y santo Sábado.

EL LUGAR DE LA RESURRECCIÓN.

No está aquí, pues ha resucitado, como había anunciado.
Mt 28,6
El lugar…
Un huerto que recuerda el Jardín del Paraíso.
Un huerto que recuerda el corretear apasionado entre el Amado y la Amada del Cantar de los Cantares.
Unas mujeres que buscan al amor, un amor humano, frágil, mortal, esclavo del espacio y el tiempo.
Unas mujeres que encuentran al Amor, un Amor Divino, Fuerte, Inmortal, presente allí donde hay un corazón que ame, libre de la atadura del espacio y del tiempo.

Para pensar….
¿Es para mí Cristo un Dios vivo o mortezino?
¿Mi vida, a pesar de las cruces, es alegre, jovial y positiva?
¿Cómo Cristo soy abierto, acogedor y comprensivo?

Con los Santos Padres…
Levántate, salgamos de aquí. El enemigo te sacó del paraíso; yo te coloco no ya en el paraíso, sino en el trono celeste. Coloqué un querubín que fielmente te vigilara; ahora te concedo que el querubin, reconociendo tu dignidad, te sirva.
Homilía antigua sobre el grande y santo Sábado

Para la realización de este número especial de Semana Santa se han consultado los siguientes libros y webs:
Biblia de Jerusalén.
Liturgia de las Horas. Tomo II.
Obras Completas de S. Jerónimo II. Comentario a Mateo y otros escritos. BAC. Madrid. 2002.
www.seminariomenorvalencia.com : muy buen material para rezar durante el Triduo Pascual.
www.mercaba.org: todas las lecturas, comentarios, homilías, reflexiones,...
www.mercaba.org/pagina_javier_leoz.htm:muy interesante todo el material que aporta este sacerdote navarro.

Dios no ha venido a suprimir el sufrimiento; ni siquiera a explicarlo. Ha venido a llenarlo de sentido con su presencia. Quedan muchas cosas oscuras; pero hay una que al menos no podemos decir de Dios: Tú no sabes lo que es sufrir.
Paul Claudel


L’Angelet de la Corda.
Un nuevo año vamos a celebrar el acto más emblemático y singular de nuestro pueblo: l’Angelet de la Corda. Para quien os escribe, constituye el encuentro más emotivo de la diócesis, tanto por su espectacularidad como por la protagonista, pues impresiona el largo recorrido, pendida de una cuerda, que realiza la niña y la serenidad de quien es objeto de todas las miradas.
Y este año la protagonista será Silvia Martí Sanz. Ella nació en diciembre de 2004 y fue bautizada el mismo día que su hermana Estella recibió la Primera Comunión. Para sus padres, Juan Emilio y Amelia y para su familia de Montaverner y Alfarrasí ese día jamás lo olvidarán, será el más emotivo, al descubrirse la cortina y allí surgir un angelito, el angelito de este año, acercándose lentamente, ante la mirada del obispo D. Enrique Benavent y de todos los presentes, tanto de Alfarrasí como de Montaverner. Se acercará y le quitará a la Virgen María el velo que cubre su rostro, provocando el estallido de alegría por parte de todos los presentes.

S. Blas
¡Qué lejos y a la vez cercano queda aquel 1678! Lejos de ser una leyenda, constituye un hecho bien documentado. La peste del garrotillo asoló nuestro pueblo. Imaginemos, las calles Mayor, Fora, Bot y poco más. Unos quince niños murieron, hasta que procedente de Bèlgida llegó la imagen del santo y … realizó el milagro.
Era un lunes de Pascua. Desde entonces más de 300 jóvenes, cuyos nombres tenemos constancia y otros tantos desconocidos, han agradecido a nuestro patrono el milagro realizado, obsequiándole con el acto más emblemático de nuestro pueblo, “el Ball de la Bandera”.
Este año corresponderá a Joan Calvo Fernández (Capità), Vicente José Ureña Revert (Acompañante), Gabi Tormo Tormo (Alferis) y Blai Ferri Micó (Acompanyant), en representación de los jóvenes de Montaverner, de la parroquia y del municipio homenajear a S. Blas.
A todos felices fiestas patronales y que el santo nos abra los ojos para ver a Dios presente en nuestras vidas, curándonos de los males que nos afligen.

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